Los Mavericks se dirigen hacia otro final apretado.
Kyrie Irving sube el balón tras una conversión de los Rockets, a manos de Alperen Sengün, que deja el partido a una sola posesión, con poco más de cinco minutos para el cierre del tiempo reglamentario. Casi tan pronto como cruza la mitad del campo, Irving le pasa el balón a Luka Doncic en el ala derecha. A continuación, camina hacia Doncic para darle una pantalla.
El objetivo no es que Irving ruede hacia el aro o dispare de 3 puntos. Es forzar un cambio de marca. Houston le da a Irving lo que está buscando, quitando a Dillon Brooks de la defensa de Doncic y dejando al mucho más pequeño Fred VanVleet sobre él.
Todo el mundo sabe lo que viene a continuación. Doncic mide tranquilamente a VanVleet, le da la espalda al aro y utiliza su ventaja de peso para abrirse camino en la pintura. Se quita de encima a VanVleet y anota una flotadora sobre Jabari Smith, para llegar a los 37 puntos en la noche. Dallas gana el partido y Luka finaliza con 41 unidades.
Esta es una jugada notable por varias razones. La principal de ellas: el pick and roll entre Doncic e Irving tiene el potencial de ser prácticamente imparable, aunque no es algo en lo que los Mavericks se hayan apoyado demasiado hasta ahora. Esto es particularmente sorprendente porque Irving tiene mucha experiencia en ese rol como cortinador.
Antes de pasar por los Celtics, los Nets y los Mavericks, Irving fue compañero de LeBron James en los Cavaliers durante tres temporadas. Durante ese tiempo, los dos formaron la pareja de pick and roll más temida de la liga. A veces era James quien ponía la pantalla, pero a menudo era LeBron quien manejaba el balón mientras Irving arrastraba a su defensor hacia el centro de la acción. Esos pick and rolls se convirtieron en una forma de aprovecharse del defensor más débil del equipo rival o en todo caso, de desgastar a su mejor jugador.
Irving y James han sido durante mucho tiempo dos de los mejores anotadores en aclarados de la liga, pero sus procesos nunca han sido los mismos. Si un defensor podía mantenerse con la velocidad y los cambios de Irving, casi seguro que no tenía respuesta para el tamaño y la explosión de James. O viceversa. Es lo que los convirtió en un dúo dinámico.
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"No vas a poner a Michael Jordan y Scottie Pippen en un pick and roll, porque el cambio de marca no importará", dijo el entrenador de los Warriors, Steve Kerr, durante una charla con Zach Lowe de ESPN. "Los equipos eligen a los objetivos más vulnerables".
Irving y Doncic suponen una amenaza similar. Doncic ha sido comparado con James a lo largo de su carrera. Luka no está ni cerca de ser el mismo atleta que LeBron es y fue, pero es capaz de hacer cosas similares en la cancha. Puede que sea el mejor pasador de la liga fuera de Nikola Jokic y lo que le falta de verticalidad, lo compensa con toque y calidad. El esloveno se ha convertido en un anotador que castiga posteado, capaz de poner en aprietos a la mayoría de los defensores. Y cuando su tiro exterior está entrando, se transforma en indefendible.
Incluso a sus 30 años, Irving también es un anotador de élite en el uno contra uno. Sólo cinco jugadores anotaron más puntos que él en aclarados durante la temporada pasada y se situó entre los mejores de la liga en eficiencia. Ya no penetra como antes, pero sigue siendo un mago con el balón. Pocos crean espacios como él y es un tirador mortal desde el drible.
Irving también puede lanzar desde el perímetro: ha conectado el 42% de sus 7.1 triples por partido, lo que lo convierte en uno de los tiradores más eficaces de la liga. Los equipos tienen que tener cuidado a la hora de ayudar y dejarlo libre, pero también al cerrar sobre él con demasiada agresividad, porque los dejará en el camino.
Los Mavericks pueden ejecutar un pick and roll más tradicional con Irving con el balón y Doncic como cortinador. Es mejor cuando los papeles se invierten, debido a lo talentoso que es Doncic con el balón en las manos, pero la idea es la misma: forzar un cambio favorable y dejar que Irving haga lo suyo.
Doncic habló de los pick and rolls con Irving cuando Dallas adquirió al ocho veces All-Star. Cuando los Mavericks han recurrido a ellos, los resultados han sido sensacionales. Los hemos visto en la recta final de algunos partidos de esta temporada, pero todavía están dejando comida sobre la mesa. Juntos, Doncic e Irving tienen 22 asistencias por pantalla -screen assists- en la temporada. Irving tuvo 42 por sí mismo en su última temporada con los Cavaliers.
Tal vez es algo que los Mavericks estén guardando para los Playoffs, cuando el ritmo se ralentiza y los equipos tienen que confiar aún más en su ofensiva de media cancha. Vimos como los pick and rolls revertidos ayudaron a que James e Irving brillen durante su tiempo juntos en Cleveland y podrían ser la clave para que los Mavericks alcancen todo su potencial en esta campaña.